lunes, 28 de marzo de 2011

PRECIPITACIÓN

Siempre que estimo que ya tengo material suficiente para iniciar un proyecto, hay un momento determinado en que tengo la impresión de que todo se precipita con excesiva rapidez. Alguien puede pensar que cómo va a haber precipitación si Hachazo de metrónomo se ha ido gestando entre el año 2002 y el 2010-¡nueve años!- y que Cotidianos contiene relatos desde el 2002 hasta el 2008 -¡ocho años!-. Debe ser una de esas impresiones que a uno se le queda y no se termina de quitar de encima. En el caso de Hachazo de metrónomo, y por una cuestión del propio formato del libro, me vi obligado a revisar el proyecto inicial para dar cabida a algún poema que inicialmente no estaba previsto publicar en este libro. Quizá se ha ganado en abrir el abanico de ideas expresadas en los poemas y quizá, de otro modo, el contenido hubiera sido demasiado contundente, sin posibilidad de relajo alguno al lector. No obstante, ahora, a toro pasado, el proyecto parece me más completo.

4 comentarios:

  1. Yo creo que eso puede ser un poco de obsesión perfeccionista. Que está bien. Pero a veces la poesía necesita también un punto de espontaneidad, que el poema no sea demasiado redondo. Esa es mi opinión.

    ResponderEliminar
  2. Magnus: Ser perfeccionista sólo se convierte en un problema si no te apercibes de que dar más vueltas al texto lo acartona. Tiene que haber un límite en la corrección, es cierto. Por el contrario dejarse iluminar por un instante espontáneo sin comprobar cómo ese mismo instante puede naufragar leído al cabo de un tiempo suele ser un fallo de principiante.Sólo si el texto soporta una relectura posterior es cuando el relampagueo se habrá convertido en logro.
    Saludos.

    ResponderEliminar
  3. Luis, perfeccionista o no. Instante espontáneo o no, hay que dar por terminado el libro. Con todas las dudas y recelos que eso conlleva, pero hay que parirlo y punto.
    (Buen consejo que me dieron a su tiempo...)

    Bxos

    ResponderEliminar
  4. Alejandra. Completamente de acuerdo, en eso estábamos.
    Besos

    ResponderEliminar